domingo, 25 de marzo de 2012

De la necesidad, virtud. Real Madrid-Real Sociedad

    Aunque no parece que el partido sea propicio para extraer conclusiones, la verdad es que la repetición de partidos de este tipo que el Madrid ha hecho este año merecen un análisis más detenido, pues no es posible que equipos como la Real Sociedad parezcan de repente tan inofensivos como hoy se mostraron en el Bernabéu.
     En realidad el partido quedó visto para sentencia en la primera parte, pues la segunda fue un mero trámite y  un tanto caótica, una vez sueltos los esquemas y las posiciones relajadas.
     No está de más reparar en que hoy había ausencias significativas: el entrenador y un jugador de la categoría de Özil. Obligado por la ausencia de Pepe y de Özil, Mourinho decidió alinear a Varane y posicionar tres delanteros. Lo que en principio era un inconveniente, una necesidad, ha resultado una ventaja, una virtud.
     Puede alegarse que la Real no fue un equipo muy ordenado y agresivo a nivel defensivo, pero alguna culpa debió tener el Real Madrid en ello. 
     El ataque resultó letal, con buenas asistencias de Kaká (jugador al que sólo podemos esperarle medio tiempo, luego baja su rendimiento de forma escandalosa) y el buen ambiente de los tres delanteros que por una vez parecieron confabularse para ser solidarios y generosos unos con otros. Quizá quisieran demostrar al entrenador que los tres caben en el equipo. 
    Ya he dicho en otras entradas que el equipo no se puede permitir la alineación de tres jugadores como Khedira, Kaká y Özil a la vez. Allí nos inclinábamos por dejar a Özil en el campo, pero incluso sin su presencia el equipo ganó en profundidad y en tensión defensiva; pues sin intención de contabilizar, al menos tres robos de pelota he visto hacer a Benzema. Ignoro si siguiendo instrucciones del entrenador, pero el resultado es el que es. 
     Por una vez Mourinho hizo lo que había anunciado días atrás: alinear a los tres delanteros a la vez. el resultado fue óptimo. Ojalá lo repita con mayor frecuencia.
     Hubo signos de preocupación en la defensa, pues en un partido de guante blanco el equipo concedió numerosas penetraciones que no tuvieron consecuencias en el marcador, pero deben preocupar. Balones a la espalda de los defensas centrales han llegado con suma facilidad. La falta de concentración y despiste de Ramos, la falta de acoplamiento de Varane, la falta de ajuste en el balance defensivo que presenta Arbeloa. Todo ello sin hablar de Marcelo, produce cierta preocupación de cara a partidos de más exigencia.
     Sigo sin comprender por qué Alonso no descansa en partidos como este que se ponen de cara tan temprano, y  juega minutos Granero. Va a necesitarlo en lo que queda de temporada con toda seguridad, pero por el momento prefiere alinear a Alonso todos los minutos. 
Creo que se equivoca. Al tiempo..

lunes, 19 de marzo de 2012

Y llegó el día. Real Madrid-Málaga

   Ya habíamos percibido que el equipo no estaba en su mejor momento, que se han hecho partidos en los que la suerte jugó a favor. Ayer no ocurrió así. Es verdad que no fue un gran partido del Madrid, pero sí mereció ganarlo. Se perdonó demasiado en la segunda mitad, y eso acabó pagándose como tantas veces sucede.
   Una primera parte en la que el Málaga demostró por qué está en la posición en la que está; jugando la pelota con un gran criterio, moviéndola con mucha rapidez y solvencia. Diríamos que la primera parte quedó en tablas en todos los aspectos excepto en el marcador, merced al gol que logró meter Benzema.
    Sin embargo la segunda parte fue totalmente diferente. El Madrid dominó el juego y tuvo numerosas ocasiones clarísimas para haber sentenciado. No lo hizo, y llegó lo que todos nos temíamos: el balón parado. Esa asignatura pendiente del equipo y del entrenador. Ayer se falló en el momento y lugar para hacer una falta, ya que Cazorla estaba de espaldas a la portería.
      Mourinho sigue insistiendo en alinear en el centro del campo a tres jugadores a los que les falta tensión y actitud (Khedira, Kaká y Özil). Mi teoría es que podrá poner a uno, incluso a dos; pero a tres a la vez, hace que el equipo se resienta en todo su juego; porque Alonso no se puede multiplicar en defensa y en ataque. 
     El entrenador alineó a Lass en el lateral derecho, tal y como venimos reclamando desde estas páginas, ante la inoperancia de Arbeloa, que no puede ser el lateral titular del Real Madrid. Por ahí estamos satisfechos, pero no acaba de encontrar una línea medular en condiciones de atacar y defender.  Esta fue la razón por la cual durante la primera parte el Málaga trató de tú a tú al Madrid en su propio estadio, pudo haber llegado ganando al descanso, y en algunas fases se permitían mover la pelota al primer toque y a una velocidad que los centrocampistas del Madrid ni la veían. En ciertos momentos pareció que el equipo tenía enfrente al Barça.
     Con esa alineación el Barça nos vuelve a hacer otro siete. Mourinho debe buscar una solución ya y prepararse para la que se viene encima entre Liga y Liga de Campeones. Tal vez esté esperando la recuperación de Di María. Esta puede ser parte de la solución, pero deberá solucionar el resto de problemas.
     Lo bueno es que no hay mucho que pensar, la Liga se vuelve a jugar en medio de semana. Una victoria hará olvidar este tropiezo al equipo; pero corre prisa hallar soluciones de cara al futuro inmediato.
 Del árbitro no vamos a hablar, se comió dos penaltis y medio delante de sus narices y no vio nada. ¿Jugaba ayer el Barça? Quizá sí, ya veremos.

domingo, 11 de marzo de 2012

Sin control. Betis-Real Madrid

   Escuché a Mourinho en la rueda de prensa responder a una pregunta. En tan solo unos segundos explicó perfectamente lo ocurrido sobre el terreno de juego: un partido sin control por parte de ninguno de los dos equipos. Añadió que a él no le gusta este tipo de partidos ya que le gusta saber que su equipo tiene el control y está en condiciones de ganarlo.
    Estoy totalmente de acuerdo con él, pero se le olvidó explicar por qué esto sucede así. Porque su análisis lo puede hacer cualquier periodista o aficionado, pero él está obligado a dar una explicación de entrenador. El responsable último de que el equipo en su conjunto juegue de esa manera es él.
    El Betis le quitó la pelota en muchas fases del juego y eso es lo que a Mou no le gusta, acostumbrado como está a que su equipo lleve la batuta; pero es que con el centro del campo que se ha empeñado en poner como titular no es de extrañar. Se puede entender que en este equipo juegue Özil, pese a sus desapariciones o altibajos (tal vez por la posición un tanto escorado a la derecha en que el entrenador le obliga a jugar); es comprensible que quiera recuperar a Kaká para la causa, ya veremos; pero no se entiende que juegue en este equipo Khedira, ni siquiera en su mejor versión, y se quede en el banquillo un jugador como Granero. 
    Tanto Kaká como Özil son centrocampistas algo displicentes, poco aguerridos, y con tendencia a la desaparición, colocarlos juntos y a la vez con Khedira da estos resultados.
    Por otro lado está el problema que ya hemos repetido en otras entradas: Arbeloa no puede ser el lateral titular del Real Madrid. Ayer fue el causante de uno de los dos goles del Betis y además realizó una falta en el último minuto en un lugar peligroso, merced a un uno contra uno que se saldó con un caño. Alguien puede decir que esto es ventajismo, pero creo que ya se ha dicho en numerosas ocasiones que únicamente cumple su función bien cuando se dedica estrictamente a ello y puede optar por anticiparse a la recepción del balón por parte de su rival. 
    Volvió a caer otro gol a balón parado, es verdad que fue un fallo de conceptos defensivos de Arbeloa, pero quizá el nerviosismo del equipo en este tipo de jugadas esté detrás de lo que viene ocurriendo. Pues el entrenador en lugar de solucionarlo, suele buscar y señalar un culpable al que estigmatiza para los restos. Véase el caso de Albiol. Si nadie le levanta la liebre, ya veremos que ocurre de ahora en adelante con Arbeloa.
    Llevábamos muchos partidos acostumbrados a ver al equipo dominar casi en la totalidad del encuentro, unas veces con más juego de ataque y otras con menos, pero siempre lejos del área propia. Ayer el Betis lo puso difícil, pero esto se sabía y Mourinho no varió su planteamiento, ahí estuvieron las consecuencias.
    Pensaremos en la Liga de Campeones que está pendiente de resolver: aún no está controlada la eliminatoria. Ya veremos. 

lunes, 5 de marzo de 2012

Demasiado fácil. Real Madrid-Español

    Pocos minutos duró la incertidumbre sobre los derroteros que el partido iba a tomar. Lo que tardó en marcar el primer gol el Real Madrid. Después el  equipo catalán fue una caricatura de sí mismo. 
   Aún así el encuentro deja dos conclusiones o enseñanzas si se prefiere. Por un lado, lo que venimos repitiendo en los últimos encuentros referente a la necesidad de que los equipos para triunfar necesitan de una concentración colectiva que no siempre ponen sobre el terreno. Este fue el caso del Español de ayer. Por otro lado, la facilidad con que este Madrid doblega a equipos que no se muestran con agresividad, y por tanto le dejan hacer su juego.
    En estas condiciones extraer conclusiones de cara a predecir hasta dónde pueda llegar resulta algo aventurado ya que la brillantez de algunos jugadores como por ejemplo Kaká puede ser un espejismo. No es lo mismo enfrentarse a equipos que no ejercen una fuerte presión, terreno en el que estos jugadores se mueven muy bien, que hacerlo con equipos aguerridos y perapetados atrás.
    Por todo esto creo que brillaron Kaká, e incluso el tantas veces denostado Khedira. Brilló Marcelo que no está muy bien, pero que despreocupado de sus tareas defensivas se mueve como nadie. 
    En estas circunstancias no se entiende que el entrenador no mueva el banquillo como debe para mantener un mayor número de jugadore en condiciones de participar en el final de temporada que se avecina. Pero se entiende menos que no aproveche un partido de este tipo para dar descanso a jugadores que han jugado con sus selecciones el miércoles (véase Alonso), o para probar a otros que bien pudieran aportar algo importante de cara al final de temporada como es el caso de Varane.    No se entiende que jugara Carvalho por delante de este chico que necesita partidos para hacerse con un puesto, que normalmente precisa de muchos partidos  para un buen ajuste.
   En fin, son peculiaridades de este entrenador que nunca se sabe qué le mueve a hacer determinadas cosas. 
     Ayer todo resultó demasiado fácil, y no sólo fue por méritos del equipo.