Si analizamos con tranquilidad el partido,
es verdad que varios jugadores no tuvieron su mejor día. Es decir, no solo
Benzema falló estrepitosamente varias oportunidades de gol. También le faltó
chispa a Isco, a Modric, a Kroos (a él nos referiremos más adelante), a Marcelo…;
y por supuesto, a Bale. Pero haciendo un balance de oportunidades y juego
desplegado, veremos que el Madrid
controló la mayor parte del tiempo el juego y, eso sí, se encontró con
un Valencia muy ordenado y que como siempre le pone las cosas muy difíciles.
Recordemos que llevan varios años muy mal, pero que siempre consiguen al menos
empatar en el Bernabéu.
Sin embargo, si contabilizamos el número de
llegadas y ocasiones a favor del equipo merengue, las miradas deben dirigirse
hacia otros actores. El equipo generó suficiente fútbol y llegadas, y solo la
falta de acierto de los delanteros, especialmente Benzema, permitió llegar al
final del encuentro con un empate que casi supo a suficiente, una vez que a
pocos minutos del final se volvió a tener que remontar un dos uno casi
imposible.
Y vamos al fondo de la cuestión. En primer
lugar hay que decir que la decisión de deshacerse de Morata sin tener un
sustituto de garantías ha sido poco afortunada. En segundo lugar, que Cristiano
debe tener más cuidado a la hora de encararse con los árbitros. Llueve sobre
mojado. El domingo hizo que nos acordáramos de Morata, pero probablemente no lo
hubiéramos hecho de haber estado él en el terreno de juego. En tercer lugar, la
alineación forzada de Casemiro en la posición de Central no pareció contar con
sustituto para su posición fija, por ahora (o sí, ahí estaban Llorente y
Kovacic). Kroos no está para estos trotes. No lo ha estado nunca, pero ahora
que se ha desvinculado, menos. No hay más que ver la actitud defensiva en el
segundo gol de los valencianos; lamentablemente tiende a estar de espectador en
este tipo de jugadas en lugar de tapar las llegadas del contrario.
Una noticia negativa más fue la actuación de
Bale. Y peor que eso, el empecinamiento
del entrenador por colocarle esté como esté. Ofrecer una jugada en todo un
partido y un remate fallido en una clara ocasión de gol es muy pobre para
cualquier jugador, para una supuesta estrella es un fiasco. Parece que
seguiremos esperando…
Una excelente noticia fue el partidazo que
nos dejó Asensio: toque, pase, arrancadas con fuerza, precisión en el remate…
Una delicia.
Para concluir, en la nueva forma de juego
del equipo, se hace necesario un delantero centro de verdad. Un rematador. Si
quiere serlo Cristiano que se ponga a ello, facultades le sobran; pero si sigue
sin querer desempeñar ese papel, pues busquemos uno de garantías, por favor.
Por cierto, si tienes dos compañeros
lesionados en la posición de central no conviene sacar a paseo el codo en un
salto y correr el riesgo de quedar sin centrales a tu equipo (véase Ramos en
Coruña). Por más que fuera injusta la tarjeta ya que ni siquiera fue falta.
A ver cómo regresamos del parón. Parece
claro que la plantilla está cerrada. Veremos.